Si es peligrosa vivimos con miedo, desconfianza, dudas, temores y limitaciones. Mientras que si es poderosa, tenemos la claridad en el camino, de seguridad, plenitud, confianza, bienestar y firmeza.
Es muy fácil pasar de un estado de plenitud a uno de miedo por un simple pensamiento. Pero cuando observamos el pensamiento como algo externo, como algo que no nos pertenece, le podemos quitar poder para que no se manifieste a nuestra realidad.
Así que nos convertimos en los observadores de pensamientos y decidimos si mantenerlo o deshecharlo, si darle poder o cancelarlo.
Observa tus pensamientos no te acomplejes de ellos, ni te traumes por pensar cosas que no desees, muchas veces son solo pensamiento colectivos que rodean el ambiente, tu fuerza mental es reconocer si ese pensamiento es de vida o de muerte, es de acción o de desecho.
Pongamos en practica observar los pensamientos. Cuando llegue a ti un pensamientos de miedo como por ejemplo "voy a enfermar" date cuenta que eres tu quien observa el pensamiento y cámbialo repitiendo con firmeza y poder "estoy saludable" pero es necesario que le quites el poder al primer pensamiento negativo, repitiendo lo positivo mínimo 10 veces, de forma convincente y si es posible en voz alta para que el consciente y el subconsciente lo asimile.
La mente es poderosa pero mas poderosa es tu alma actuando se eleva y supera los pensamiento falsos e irreales que solo logran limitarte.
En este instante controla lo que piensas, no negandote a ello, sino aceptando, limpiando, cancelando, transmutando y elevando. Con el poder de la palabra esta el poder de la creación y allí esta lo que creemos, sentimos y vivimos como verdad.
Sat Nam
MB
