Energía omnipresente

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La energía es omnipresente y se siente cuando activas la fuente del amor.

La energía es sublime a las emociones falsas o reales, es allí cuando debemos reconocer que tipo de energía se está haciendo presente, que tipo de energía es la que vibra en la situación que acontece.

Cuando estamos alertas en reconocer las emociones podemos identificar que emoción es real y que emoción es irreal. Estando presentes reconocemos el ego en las situaciones o el amor divino.

La aceptación a través del reconocimiento es importante, muchas veces queremos ocultar la verdad cuando no reconocemos que es el ego quien esta actuando en ese momento.
Mientras mas te conectas con tu ser, te haces mas susceptible a percibir el amor o el miedo, las rabias o las alegrías, la verdad o la mentira. Somos capaces de conocer las únicas dos energías que se manifiestan y canalizar la que queremos que radique en nuestro día a día.

Al hacerte receptivo de la energía eres capas de transcender y mover esa fuente en diferentes direcciones solo con la intención.

Con la practica de la meditación, la respiración, la calma o simplemente busca momento para ti y afirmar o escuchar lo que dice tu cuerpo y habla tu mente reclama, puedes activar la intuición y percepción, definir las emociones en todas las situaciones.
Agradece cuando reconoces el estado de DIVINIDAD en ti y perdona o mejor dicho perdónate cuando es el EGO es quien se manifiesta a través de los miedos o emociones falsas.

Reconoce quien eres de verdad y cual es tu misión por derecho propio de nacimiento. Déjate guiar por la energía que se manifiesta en ti y en todo momento, pide ser guiado, orientado por el camino de la luz y la verdad. Solo pidiendo o aclamando ser guiados te dejas orientar, de lo contrario ninguna identidad suprema podrá intervenir en tu libre albedrio.

Manifiesta la energía omnipresente de tu ser y vibra con la puente del amor.

Respira, confía y déjate guiar.

“Somos seres de luz dándole vida al cuerpo”… Enciende tu luz y activa tu potencial.

Reconozco la luz en mi

Me dejo guiar, sabiendo y reconociendo ¿qué es lo que quiero y deseo para mi, para mi bienestar y mi tranquilidad física y mental? Luego de reconocerlo, agradezco al universo porque tengo plena fe de que todo esta conspirando para seguir el camino que me corresponde, me dejo guiar por la gran fuente del creador y cada mañana entrego mis pensamientos, palabras y acciones al cosmo y al ángel de luz que me fue asignado para estar presente y alerta a las bellas señales que me encaminan en dirección correcta.

Cuando agradezco reconozco que la luz esta en mi, cuando pido reconozco que no estoy solo y cuando entrego confío en que hay una fuente muy grande dándome la dicha de crecer y aprender en mi dharma correspondiente.

Hoy, reconozco que vibro con la fuente divina. Pero también debo ser humilde y pedir perdón por los momentos en que el ego ataca y combaten los miedos, las rabias, los celos, la intolerancia, el coraje., en fin en los momentos cuando yo no soy amor, cuando se me olvida quien soy. Pero, nuevamente se, que retorno a mi paz, observando en ese momento de ego, YO SOY el que se da cuenta, yo no soy el que reacciona, y cambio ese momento por uno mejor, pero para limpiar la energía que fue creada en ese momento, tengo que perdonar, pedir perdón y amar nuevamente confiando en la dicha y voluntad divina, que limpia y transmuta lo que es irreal a lo que es real.

Es tan encantador reconocer cuando estamos conectados con la divinidad y aprovechar esa energía al máximo. Que te invito a reconocer la dicha dentro de ti. Al hacerlo, tu entorno cambia, tu circulo cambia, o mejor dicho TU cambias y por ende la forma de percibir las cosas externas serán diferentes.

Siente, conversa con tu Dios interior, medita, háblale que serás escuchado, activa tu centro de intuición y percepción y las respuesta te guiaran en la verdad.

Siempre, CONFIA, el proceso es sencillo: Pido, Entrego, Confío y dejo fluir. Y ante la situaciones que reconozco son irreales, para limpiarlas: Perdono, Pido perdón, Agradezco y con Amor dejo ir.

La luz en mi saluda la luz en ti,

Merlys B

Luz Divina

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La Divina presencia es la energía que te brinda paz. Es muy fácil desconectarte de esa energía cuando vibras a través de los miedos y te haces vulnerables a ellos, por tanta contaminación externa, donde hay luz hubo oscuridad y donde hay oscuridad se puede despertar luz. Siempre habrán puntos de luces menos despiertas queriendo sabotear la luz de la verdad.

Es en ese momento cuando debemos reconocer ¿quienes somos?  Para entrar al despertar de la conciencia cristica, o la conciencia de Jesús, el gran maestro que vino a enseñarnos que “Dios y yo somos la misma fuente” “Yo soy uno con Dios y todo lo es”.

Allí radica única verdad y la razón de vivir las experiencias del ahora.

Cuando invada el miedo, enciende tu luz, permite que la calma inunde tu Corazón nuevamente y que desde allí irradie luz a todo tu entorno, compartiendo esta vibración en donde hay oscuridad y proyectando la luz en tu reflejo, ese reflejo que son los que nos rodean, los que nos aman, y los que nos atacan, TODOS en tu entorno que generen paz o generen desamor, todos son tu reflejo, atraemos lo que somos y hasta atraemos lo que no queremos ser por enfocarnos en esa creencia.

Así que la mejor manera de renacer ante la luz o de encender la chispa de luz en ti es reconocer que no estas solo, que hay una fuente Divina en ti esperando ser encendida o esperando su llamado.

Protégete y déjate proteger, protege tu mente, tus pensamientos y protege tu forma de hablar y expresarte ante el mundo, ya que ese es tu mundo y tu realidad.

La conciencia Divina se enciende en el estado de amor, ya que con el miedo solo atrae miedo y oscuridad, con amor, amor a ti, amor a la vida, amor al mundo, transformas desde adentro y canalizas la luz, apartándote del miedo.

“Divina presencia, hazme instrumento de tu paz, Divina presencia protege mi mente y mis pensamientos en este día, muéstrame la luz en todas las situaciones y personas que estén en mi camino, muéstrame la luz en este aprendizaje de vida”. Repitiendo y afirmando esto, lo entregas y confías en la Luz que se enciende en tu alma. Confía en ti, en Dios que vibra en ti.

No te dejes confundir por el ego y retorna a tu verdad, perdona tus pensamientos y acciones y retorna a tu luz, nunca es tarde y siempre estamos a tiempo para villar como el Sol y ser uno con el amor infinito y real.